miércoles, 3 de diciembre de 2008

DESPERTARES Episodio1

Después de un absoluto sopor narcótico, ayer desperté por unas pocas horas. Al mirar al espejo tuve una extraña sensación por no reconocer al personaje que se reflejaba en él. Tras breves momentos de incertidumbre y angustia ante la posibilidad de una esquizofrenia o un de un desdoblamiento de personalidad y también por el sabor a sangre de mi boca, empecé a recordar que me habían intervenido de la muela del juicio y que me advirtieron de que podría sufrir hinchazón, hematomas y demás molestias. Fue entonces cuando me dí cuenta que la imagen de una cara lo más parecida a una mezcla de la Novia de Chucky, Melanie Griffith y muñeca hinchable, era la mía! Menos mal, empezaba a sentir preocupación por mi salud mental ya que me pasé la noche huyendo de un tal Polansky que me había invitado a una fiesta y en vez de sacarme a bailar no hacía más que perseguirme para clavarme una estaca. ¡Que sueño tan raro! Por suerte tengo alas y pude escapar volando. Espera un momento, ¿desde cuando tengo yo alas? Claro que boba, desde que duermo boca abajo. Menuda memoria la mía. Pero entonces, ¿porque me reflejo en el espejo si nunca había pasado antes? ¿Me estaré volviendo humana? Me da la impresión que tengo que ir a tomar mis pastillas.

1 comentario:

Amparo dijo...

Guárdame un par de tus pastillas, anda.
Oye, te he imaginado con alas y estás monísima.